El católico es feliz porque sabe a donde va…, ¡claro hay que ser fiel a Dios!

Realmente muchos han llegado así a La Santa Iglesia, evadiendo obstaculos.

Dictadura mayoritaria.

“¿No sabéis que los injustos no poseerán el reino de Dios? No os equivoquéis: ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los AFEMINAD0S, ni los mentirosos con los hombres, ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores, poseerán el reino de Dios.”
— 1 Corintios 6:9–10

“Y quitó de la tierra a los AFEMINAD0S, y quitó toda la inmundicia de los ídolos que habían hecho sus padres.”
— 3 Reyes 15:12

Kennedy Hall comenta al respecto en su libro sobre la masculinidad tradicional:

«Afemina0 no significa "feminidad", ya que la feminidad es una perfección, como la masculinidad. Afeminamiento es una palabra completamente diferente, y en su etimología, encontramos una definición para cosas como "suavidad" en su uso latino. La palabra griega para afeminamiento en el Nuevo Testamento esmalakia (μαλακία), que significa “suavidad”.
Santo Tomás define el afeminamiento como una renuencia a sufrir debido al apego al placer. Explica que el afeminamiento es un vicio opuesto a la perseverancia. En esencia, el afeminamiento es un vicio que se opone a la cruz, lo cual es una característica desafortunada que podría explicar la multitud de hombres blandos que rechazan los sufrimientos redentores de la vida en pos del placer temporal.
Nuestra sociedad está llena de hombres afeminados. Esto es evidente en la desenfrenada dulzura del hombre promedio y la falsedad de los supuestos hombres que inundan nuestra cultura de celebridades y paisajes políticos. Uno no necesita mirar mucho más allá del primer ministro canadiense, Trudeau, un hombre que hace todo lo posible para posar con drag queens en cada oportunidad. El hecho de que un hombre como él sea el rostro de mi país muestra hasta qué punto nuestra sociedad ha decaído en virtud.
Canadá es una nación tradicionalmente conocida por los leñadores, la cerveza fuerte, los inviernos duros y las peleas de hockey. En lugar de un gran líder, mi amada nación ha sufrido por un hombre que parece más interesado en hacer una audición para una banda de chicos que en liderar un país».

CRISTO REY CONTRA EL LAICISMO Y EL INDIFERENTISMO