Londres 26 de marzo 2024

#CartasDeLondres

Hola,

El tiempo pasa veloz y ya son dos meses de mi nueva vida en Londres. Esta Semana Santa es un buen momento para marcar el final de mi llegada a la ciudad.

Una de las cosas que deseaba comentarte, y que es característico en la religión cristiana de este país, es que la Iglesia Anglicana y la Iglesia Católica tienen muchos elementos similares, al menos en la arquitectura de los templos antiguos. Cuando el Rey Enrique VIII, en 1535, rompió con la Iglesia de Roma, confiscó y persiguió a la iglesia católica y esta es la razón por la que las iglesias antiguas eran católicas, pero hoy son anglicanas.

También hay aspectos de la liturgia o de las imágenes sagradas que pueden confundir, y para complicar más el panorama, en la Iglesia anglicana hay divisiones internas y en algunas de ella - denominadas “altas” – se exhibe la foto del Papa de la Iglesia Católica. ¿Entines algo?

De hecho, un problema real en Londres es que muchos latinoamericanos asisten a la misas de la iglesia anglicana y se bautizan, confirman y se casan sin saber que no son parte de la Iglesia Católica. Así que un obispo ha sugerido que se ponga algunos letreros en las iglesias invitando a la “misa católica”. Obviamente, las iglesias anglicanas, que durante la semana son cafeterías, bares o bibliotecas, ofrecen sus amplios espacios como centros de agregación para los emigrantes, y de alguna manera tienen público.

En todo caso, en mi opinión hay una especie de fluidez entre los anglicanos y los católicos ingleses. Es muy común que haya convertidos de un lado y del otro, y es normal entre ellos hablar del tema. Sucede también que sacerdotes anglicanos, casados y con hijos, se convierten al catolicismo, y entonces con una dispensa especial, hacen un itinerario de formación y se “vuelven” a ordenar sacerdotes católicos.

A veces, en medio de una conversación entre colegas sacerdotes, alguno comenta: hoy tengo que ver a mi esposa, o a mis hijos, o debo atender asuntos de la escuela, etc.; y todo normal. No pasa nada.

Para ser preciso, también existen sacerdotes católicos que dejan su ministerio y se convierten al anglicanismo, o que incluso se ordenan sacerdotes de la iglesia anglicana.

Así que este tema, es muy característico de Inglaterra y en Londres se ve, se escucha y se conoce de estos casos. Pero no sorprender a nadie.

No sé, me parecía curioso al inicio, pero como todo en la vida, se normaliza.

Otro tema que estos días ha impactado en Inglaterra ha sido la masiva especulación sobre la desaparición de la princesa Kate, esposa del futuro rey del Reino Unido, quien de pronto, emitió un video informando al mundo sobre su salud y el cáncer que padece.

La noticia cayó como un trueno en cielo sereno, porque la situación que se ha creado en la Casa Real es angustiante. Actualmente el rey Carlos se está tratando de un cáncer en la próstata y ahora la futura reina, a su joven edad, madre de tres niños, tiene un cáncer que no se sabe de qué tipo es. Como verás, las tinieblas de la incerteza cubren la familia real y su actual rol en la sociedad. Para este país ellos son un punto de referencia e identidad desde hace siglos. ¿Qué te parece?

Sobre mí, no hay mucho que contar en esta carta. Estoy bien y sigo estudiando el inglés. Mientras más lo estudio, me doy cuenta que necesito hablarlo mejor. Pero esto no me preocupa. Es cuestión de tiempo.
Por ahora, estoy pensando en mi próximo viaje a Roma que será dentro de un mes. Será una pausa corta, pero estoy soñando con ello porque extraño el clima primaveral del Roma, la comida y la sonrisa luminosa de mis amigos. Pero eso es otro tema.

Por ahora, te mando un abrazo.

Yours.

Ariel

La "surgery"

Londres Martes 19 de marzo
#CartasDesdeLondres
querid@ L,

En tantos lugares hoy es el día del padre o la gran fiesta de San José, pero aquí es un día como cualquier otro.

Este año la Semana Santa llega muy temprano, así que habrá trabajo adelantado. Te puedo decir que el trabajo en la iglesia es intenso y no hay un día igual al otro. Aunque intento crear un patrón en mis horarios, me doy cuenta que no es fácil porque las actividades son como las olas de un mar agitado, a veces van y otras vienen, arrastrando todo lo que encuentran en su camino.

Pero, al menos un día a la semana intento desconectar y dedicarme a temas personales como el cuidado de la salud.

Y justamente deseo comentarte sobre el servicio de salud de este país. Lleva el nombre de NHS por sus siglas en inglés (National Health Sistem) y es una estructura gigante en todo el país, pues la salud está garantizada como un derecho de los que residen en este país. Cada persona tiene su número de NHS y puede acceder a los servicios de salud.

Es fácil imaginar que el sistema está sobrecargado y los profesionales por un lado están saturados de trabajo y existe una fuga enorme hacia el sector privado. Además, por lo que he entendido, ningún gobierno ha querido “meter la mano” para resolver sus problemas, porque la estructura es tan grande que sería casi imposible y por lo tanto el sistema sanitario no se ha renovado desde hace décadas y sigue arrastrando y acumulado los problemas.

Sin embargo, es una especie de coche viejo que funciona. Se puede hacer citas y desde que me inscribí me han llegado mensajes al celular para que me haga un análisis de sangre preventivo. Así que tuve que reservar mi hora en su página web, luego llegué a mi posta sanitaria local, que en inglés tiene el nombre de “surgery”, y luego que me sacaron sangre, tuve que hacer otra reserva online para que me den los resultados. Pasado un par de días me pidieron que solicite otra cita para ver a un médico que debía interpretar esos resultados y como no tengo datos en mi registro médico, la doctora me hizo un cuestionario: ¿se mueve? ¿fuma? ¿come grasa? ¿cuánto tiempo camina? ¿hace ejercicio?; y un largo etc. Luego, mientras llenaba la pantalla del computador en su esquema según las respuestas que daba me dio su veredicto: en los próximos diez años usted no tendrá un paro cardiaco y es probable que no sea diabético. Hasta luego.

Salí de la “surgery” tranquilo e intranquilo porque el futuro de mi salud ahora dependía de un algoritmo.

Ahora tengo planeado pedir otra cita con un doctor general que me verá las rodillas y dependerá de esa visita si me deriva a un especialista. Y ya estoy prevenido que las visitas al especialista tienen tiempos de espera muy largos. Así, que guerra avisada no mata. Pero los tiempos de espera sí.

La próxima semana te contaré más de mi vida en Londres.

Te mando un abrazo.

Yours.
Ariel

Era justo y necesario visitar la exposición «Yoko Ono, la música de la mente«, que desde febrero hasta septiembre del 2024 se presenta en el museo londinense Tate Modern. Si bien el precio de las entradas, como todo lo demás, es sumamente alto, tuve la suerte de que mi profesor de inglés tiene una suscripción anual que le da acceso a todas las exhibiciones privadas junto a un acompañante. Así que ese fue mi pase para explorar la producción artística de esta mujer, más conocida como la pareja de John Lennon. https://arielberamendi.com/2024/03/18/critica-la-muestra-de-yoko-ono-en-londres/

Ariel Beramendi

Crítica: La muestra de Yoko Ono en Londres

Era justo y necesario visitar la exposición «Yoko Ono, la música de la mente», que desde febrero hasta septiembre del 2024 se presenta en el museo londinense Tate Modern. Si bien el precio de las e…

Tower of London

Londres 11 de Marzo 2024

querid@ H,

El ritmo de trabajo en la parroquia de Londres es como una esponja que absorbe el tiempo, y casi sin darme cuenta han pasado otras dos semanas y pude escribirte.

Llevo más de un mes en Londres y sigo aprendiendo la vastedad de esta ciudad cosmopolita, todo es icónico e histórico. La gente apresurada yendo de un lugar a otro contagiados de velocidad.

Desde el 1 de marzo he comenzado el gimnasio, el lugar abre 24 horas, todos los días de la semana. Esos horarios son la metáfora de la ciudad.

Me pesé y he perdido 4 kilos en un mes. Sin hacer ejercicio. No sé si la causa es la comida, el clima o el estrés que tengo para adaptarme lo más rápidamente al nuevo contexto. En todo caso los números de la balanza digital son claros y ahora estoy contento de hacer ejercicios un par de días a la semana.

Ahora sé que Londres es la ciudad en la que se aprende a caminar bajo la lluvia, de manera literal y de también metafórica. El frío, la falta de sol y los constantes chubascos son lo más complicado para acostumbrarse. Pero la conversación con un antiguo amigo inglés me devuelve a la realidad, él me dijo: Ariel, en este país mucha gente llega del continente africano o desde India, y ellos se han acostumbrado muy bien, entonces tú también lo harás. Y seguramente así será.

Recuerdo que si llovía en Roma se suspendían las actividades. Eso no sucede en Londres que vive acelerada e independiente del clima.

También te cuento que, al menos una vez a la semana, salgo a pasear. Poco a poco voy conociendo la ciudad. La semana pasada un señor de la parroquia, que está jubilado, me ha invitado a conocer la Torre de Londres, uno de los lugares más históricos de Londres, allí se custodia las joyas de la corona de la familia real. Esa ciudadela medieval al borde del río Thames, con tanta historia es impresionante, y en tantos viajes que hice a Londres no la pude visitar debido a los precios, cada ticket de ingreso cuesta 34 libras. Haz tus cálculos.

Como ya te conté, en mi trabajo visito una escuela. Interactuar con los niños es parte de la visita, así que por media hora, ellos me preguntan lo que desean. Sus preguntas son directas: ¿te gusta tu trabajo?, ¿por qué has venido a este país desde Roma? ¿si no fueras cura, qué te hubiese gustado hacer? ¿qué es lo que más te gusta de ser cura? Mis respuestas son honestas pero metafóricas y así comparto con ellos mis impresiones durante este periodo de mi vida. Es algo lindo de este trabajo.

De vez en cuando hay otras sorpresas agradables. El pasado 7 de marzo fue el día internacional del libro en el Reino Unido, y en cada escuela los niños se disfrazan de algún personaje literario y pasan clases así vestidos así. Ese carnaval inspirado en la literatura fue un toque de color y fantasía en la semana.

Ah, también presidí mi primera función en un crematorio. Una experiencia nueva. Poca gente, botones para poner y quitar la música, el féretro depositado en un altar mecánico y al final de la ceremonia, otro botón, (por suerte no me equivoqué), para activar las cortinas, que al igual que un teatro se cierran para cubrir el ataúd, que después desciende al horno donde será carbonizado. 20 minutos después los familiares reciben las cenizas. Todo es veloz porque después llega otro ataúd, otra familia doliente, otro ministro de religión, y el proceso continúa.

Pasan los días en esta ciudad sin palomas y con tantas ardillas, una ciudad sin campanas en la que sigo aprendiendo a caminar bajo la lluvia.

Pronto, llegará la Semana Santa y después de ese momento álgido tendré unos días de vacaciones. No veo la hora de ir a Italia a disfrutar de la luz y del mediterráneo, pero sabiendo que por ahora este es mi nuevo destino.

Espero que te haya gustado esta mi carta un poco más larga que las otras, pero no quiero dejar de escribirte al menos una vez a la semana.

Abrazos.

Yours

Ariel

enfermos en sus casas. Hay muchos ancianos que viven solo y llevarles la comunión de vez en cuando es un gran regalo para ellos. A estas visitas se debe añadir las visitas a uno de los hospitales más grande de Londres. Se llama “San George Hospital”. Las dimensiones de la construcción son enormes y la cantidad de gente que trabaja, visita o se atiende allí es enorme. Me tocó dar la extremaunción a una persona de 65 años, y como era mi primera vez en la estructura, me esperaba una sacerdotisa africana, que pertenecía a la iglesia baptista, y fue ella que hizo conocer el centro de apoyo espiritual, donde hay ministros de distintas religiones, y luego ella me acompañó a la sección de cuidados intensivos para que yo hiciera lo mío. Fue la primera vez que interactué con una ministra femenina. Todo O.K.

Los días pasan y ya es un mes que estoy en Londres, así que habrá mucho más por contarte en mis cartas.

Te extraño y espero pronto volver a verte.

Yours.

Ariel

#CartasDeLondres
Londres 27 de febrero 2024

Querid@ M,

Son dos semanas que no te escribía. La verdad es que por un lado siempre hay pequeñas y grandes actividades en la parroquia que se van sumando y consumiendo los días. Y aunque esto no es excusa para dejar de enviarte mis cartas desde Londres, un hecho inesperado sacudió mi vida.

Mi amiga, a quien yo llamaba mi madrina, falleció en Roma. A pesar de sus 83 años ella estaba todavía bien de salud, pero una serie de eventos: una caída el día sábado, el descuido de los que la cuidaban, un médico que no llamó la ambulancia… dieron como resultado que el lunes 21 de febrero una de las últimas representantes de la “dolce vita” falleciera. Era una amistad que duró muchos años y quizás es la amistad más antigua que tenía en Roma. Pero se fue. Así que logré organizarme para viajar a Roma por menos de 24 horas y asistir a su funeral. Cerré así también otro ciclo de mi vida, aunque las vivencias y enseñanzas son un tesoro que continuará dando sus frutos.

Estas fueron las palabras que pronuncié en el funeral:

Adiós Ira Fürstenberg

(Palabras de despedida en el funeral de la Princesa Ira von Fürstenberg. Pronunciadas por el Padre Ariel Beramendi. Roma, 23 de febrero de 2024)

Hay personas que atraviesan este mundo transformando e iluminando la vida de los demás.

Tú, Ira von Furstenberg, fuiste una de ellas. Los niños de Costa de Marfil siempre te estarán agradecidos, al igual que las muchas obras benéficas a las que contribuiste a través de tus "exhibitions" y cenas de gala.

Tu alegría, tu energía y tu curiosidad nos enseñaron a vivir intensamente. Ahora sentimos un vacío.

Ira, nuestra princesa, como todos nosotros, fuiste una peregrina en este mundo, incluso pasando mucho tiempo surcando los cielos. Dios te dio dones que supiste utilizar al máximo.

Cada vez que te escuchaba responder una llamada telefónica desde cualquier parte del mundo, me maravillaba al escucharte hablar en un idioma diferente para planificar tu próximo viaje.

Hoy, al despedirte, todos agradecemos a Dios por haber tenido el privilegio de ser tus amigos.

Sé que tú y yo tuvimos tiempo de hablar del momento en que este viaje terrenal terminaría. No querías sufrir una larga enfermedad como le sucedió a tu madre y querías descansar cerca de tu padre. Así fue y así será.

Aunque siento que esta despedida debería haber ocurrido un poco más adelante, lo más tarde posible, todos tenemos una cita inesperada con nuestro destino.

Este es el momento de entregarte en las manos del Señor. Este es el momento de sentirnos pequeños frente al misterio de la vida y la muerte.

Te recordaremos feliz, sonriente, enérgica y preocupada por la vida y las situaciones de los demás. Para que cada uno tuviera su lugar en la mesa: ya fueran nobles, políticos, artistas o personas simples pero auténticas.

El Señor te ha preparado una habitación enorme y un banquete sin fin. Nos volveremos a encontrar algún día.

Descansa en paz, nuestra princesa.

Aquí en Londres, sigo descubriendo la ciudad. Especialmente los días martes que es el día de descanso semanal y aprovecho para conocer algún barrio o museo londinense.

La semana pasada, como parte de mi trabajo, comencé a visitar la escuela parroquial y fue divertido recibir preguntas de los niños. Siempre se puede aprender de los pequeños. Todos los niños llevan uniforme de color morado, pero durante mi visita había una niña con ropa diferente. Así que el staff de la escuela me hizo notar que los niños pueden vestir como deseen el día de sus cumpleaños y esa chiquilla estaba de aniversario.

Otra cosa que aprendí, fue que el miércoles de ceniza la asistencia a la misa es masiva y a la gente le gusta el signo de las cenizas en la frente. Así, comentamos con los otros colegas lo curioso que resultaba que un sacerdote (anglicano) estuviese parado en la puerta de la estación de tren local impartiendo la cruz de cenizas sobre su frente. Esa imagen me pareció muy evocativa.

Finamente, he comenzado a visitar a